VIERNES DE PELÍCULA | La teoría del todo

¡Muy buenas! Como creo que ya he comentado alguna que otra vez, cuando llega la época de los Oscars me gusta mucho ver los trailers de las nominadas a mejor película y visionar aquellas que más me llaman. Este año pude ver casi todas las nominadas a mejor película y como esta es una de las que más me han gustado pues no pude evitar traeros mi opinión para ver si os animáis a verla.

Director: James Marsh

Título original: The Theory of everything

Guión: Anthony McCarten (Libro: Jane Hawking)

Duración: 123 min.

Año: 2014

País: Reino Unido

Género: Drama. Biográfico.

Actores: Eddie Redmayne, Felicity Jones, Charlie Cox, David Thewlis, Emily Watson, Simon McBurney, Harry Lloyd, Maxine Peake, Charlotte Hope, Adam Godley, Christian McKay.

La cinta gira en torno a la vida de Stephen Hawking, el importante teórico y divulgador científico que cambió la historia de la ciencia y la tecnología moderna para siempre. La película se centrará en la relación que mantuvo el británico con Jane Wilde, su primera mujer, con quien contrajo matrimonio después de que le diagnosticaran una enfermedad por la que no le quedaban más de dos años de vida.

Lo cierto es que, aunque me llamaba porque había leído críticas buenísimas y me la habían recomendado muchísimo, me echaba un poco para atrás que fuera autobiográfica. No sé por qué asociaba este factor con el aburrimiento pero me alegro de no haberme dejado influir por ese prejuicio porque me hubiera perdido una historia que me ha terminado encantando.

La teoría del todo está basada en el libro que escribió la primera esposa del famoso ciéntifico, Jane Wilde, y se centra en narrarnos cómo fueron sus años de matrimonio: cómo se enteraron de la enfermedad, cómo esa fue afectando poco a poco a su vida, cómo Stephen no se rindió en ningún momento y siguió trabajando en lo que le gustaba a pesar de sus limitaciones...  El motivo por el que pensaba que me aburriría es porque creía que se iba a centrar más en su obra y sería algo más científica pero, por el contrario, nos han mostrado más el drama de lo que supone tener que vivir con esa enfermedad -tanto para él como para la gente que le rodea-, más que los aspectos más académicos de la vida de Hawking. Y quizá es por eso que la cinta se me ha hecho tan entretenida, yo amo el drama cosa que aquí lo hay a raudales y además, tiene pequeños toques de humor que aligeran un poco el peso dramático. Además, el mensaje que transmite me pareció muy bonito e inspirador: nos habla de esa fuerza que muchas personas tienen para no rendirse ante los imprevistos de la vida, de seguir luchando por sus sueños incluso aunque su cuerpo no esté de su parte, de sacrificarte por las personas que quieres... Sinceramente, es toda una lección de vida.

Pero si tengo que destacar algo de esta cinta, sin ninguna duda, esto sería las increíbles actuaciones de los dos actores principales: Eddie Redmayne y Felicity Jones. Ambos a mi parecer hacen un trabajo maravilloso, tienen papeles muy dramáticos y han sabido transmitir todo lo que estos le demandaban. Eso sí, tengo que destacar expresamente el trabajo de Redmayne porque es para quitarse el sombrero de lo bien que lo hace: el mostrar el deterioro progresivo de Hawking, sus dificultades para andar, para hablar y en última instancia -cuando ya no puede mover casi ninguna parte de su cuerpo- lo mucho que lograba expresar con sus expresiones. Sinceramente, un Oscar más que merecido el que ganó el otro día. Otra cosa que me encantó es la cuidada banda sonora que tiene y que ésta junto con la preciosa fotografía con la que cuenta hacen que esta cinta sea una auténtica maravilla. La verdad es que me alegro muchísimo de haberle dado una oportunidad porque sin llegar a ser un peliculón sí que me ha parecido muy inspiradora y bonita.

Por todo esto, La teoría del todo me ha parecido una cinta preciosa, con un gran mensaje de autosuperación y de no rendirse nunca, y más dramática y menos científica de lo que creía. Nunca imaginé que una película autobiográfica me llegara a gustar tanto pero entre la fotografía, la banda sonora y las increíbles actuaciones de los dos actores principales, La teoría del todo me ha resultado más entretenida de lo que en un principio pensé.