¡Muy buenas queridines! Espero que estéis teniendo un fantástico fin de semana. Hoy toca un nuevo Cuéntame otro cuento, por lo que nos remontaremos a nuestra infancia para recordar una las historias más conocidas -y versionadas- y conocer, también, de dónde sacó la idea el Señor Disney.
En esta nueva entrega me gustaría hablaros de otra de esas historias acompañaron durante nuestra infancia, así que aquí os traigo la la verdadera historia de La Cenicienta, que sólo se diferencia con la de Disney en que es un poco más sangrienta. Recordad que la entrada estará llena de spoilers de la "historia original" por lo que si tenéis intención de leerlas o algo tened cuidado que aquí os las destripo enteras.
¿Qué nos cuenta Walt Disney?
Hace mucho tiempo en un reino muy lejano, vivía un feliz y acaudalado matrimonio que tenía una hija llamada Cenicienta. Al poco de morir su madre, su padre creyendo que lo mejor para lo joven era tener una nueva madre se casó de nuevo con una viuda que tenía dos hijas feas a más no poder. Al poco de mudarse, el padre murió y a partir de entonces la vida de Cenicienta fue de mal en peor. Como todos sabéis a la pobre la quitaron todas las cosas bonitas que tenía y la pusieron a hacer las tareas del hogar como una criadas más.
En esas andaba la chica, limpia que te limpia, cuando llega a la casa una invitación para asistir al gran fiestorro que va a organizar el rey en palacio para encontrar esposa a su hijo. Cenicienta se esmera en acabar las tareas del hogar pronto e incluso saca tiempo -con ayuda de sus amigos los ratoncitos- para hacerle unos arreglos a un vestido de su madre, con el fin de poder asistir a la celebración. Pero sus hermanastras temerosas de que Cenicienta las eclipsara en el baile con su belleza, le estropean el vestido. La chica entra en depresión total y absoluta, hasta que se le aparece una regordeta mujer con una varita que dice ser su hada madrina. Ella le da un vestido, unos zapatos y una carroza, pero le avisa que tiene que estar en casa antes de la medianoche porque a esa hora el sortilegio se romperá. Cenicienta asiste al baile, baila con el príncipe y los dos se enamoran perdidamente, pero al dar las doce la chica tiene que huir. Y en su huida se deja uno de sus zapatitos de cristal olvidado en las escaleras del palacio.
Al día siguiente, el Príncipe -que está en un sinvivir por no saber quien es la dueña del zapato- manda al gran duque a que vaya casa por casa probándole el zapato a todas las chicas hasta encontrar a la elegida. Cuando llega a casa de Cenicienta, la madrastra la encierra en una habitación para que nadie la vea, mientras sus hermanas intentan meter sus enormes pies en el pequeño zapato. Mientras tanto los ratoncitos amigos de ella, Gus y Jack, consiguen liberar a Cenicienta y esta irrumpe en el salón antes de que el gran duque se vaya. Peeeero, la madrastra que es mala hasta decir basta, hace que el hombre se tropiece consiguiendo así que el zapato se estrelle contra el suelo y se rompa. Llegados a ese punto, todos estábamos conteniendo el aliento y casi derramando lágrimas de impotencia porque veíamos que a Cenicienta se le escapaba su final feliz; hasta que ella saca el otro zapato de cristal que tenía guardado, se lo prueba para demostrar que es suyo y la llevan a palacio para que se case con el Príncipe. Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
Moraleja: con un poco de suerte y un hada madrina (¡importante!) todos tus sueños se pueden hacer realidad.
¿Cuál es la verdadera historia?
La historia original viene de una transcripción hecha por Charles Perrault en 1697 de una leyenda muy popular transmitida hasta entonces oralmente. Él la publicó bajo el título de 'Cendrillon ou La petite pantoufle de verre' (Cenicienta o el pequeño zapato de cristal). Años más tarde en 1812 los hermanos Grimm relanzaron la historia, aportando su granito de arena a ella, y consiguiendo que se hiciera más popular de lo que ya era. A pesar de las dos versiones que hay, para no hacer esta entrada kilométrica os hablaré solo de la versión popularizada por los Hermanos Grimm.
Erasé una vez que se era, un hombre muy rico al que se le murió su mujer dejándole al cuidado de su única hija. Como el hombre se sentía solo, ese mismo invierno volvió a contraer matrimonio, y su nueva esposa se trajo con ella a sus dos hermosas hijas. Porque sí, en la versión original las dos hermanastras son bellísimas aunque estén podridas por dentro. La cosa es que, una vez se instalan, se dedican a hacerle la vida imposible a la pobre muchacha: quitándole todas sus pertenencias, rebajándola al nivel de criada y apodándola Cenicienta. A todo esto, el padre, como buen calzonazos que era, se calla y las deja hacer. Lo más normal del mundo, vamos. La pobre Cenicienta trabajaba de sol a sol como una esclava para luego no tener ni una mísera habitación en la que acostarse y tener que dormir al lado de la cocina sobre la ceniza (de ahí su nombre).
Un buen día el padre se marcha a una feria y le pregunta a sus hijas que quieren, y mientras las hermanastras piden vestidos y joyas, Cenicienta le dice a su padre que le traiga el primer palo que vea en el camino. Digo yo que pensó, "total, si pido algo valioso mis hermanas me lo van a quitar, así que pido un palo que no creo que ellas lo quieran para nada". Su padre se lo trae y ella lo planta en la tumba de su madre, donde la ramita crece y se convierte en un árbol donde habita un pajarillo blanco que cumplía sus deseos. En estas andaba, cuando se enteró que el rey iba a organizar una macro fiesta de tres días con el fin de que su hijo consiguiera esposa. La pobre Cenicienta quiso asistir pero su madrastra y hermanastras la mandaban hacer estúpidos recados para que estuviera ocupada. Pero la chiquilla, que tonta del todo no era, le pidió ayuda a los pajaritos para hacerlos más rápido y ver si así podía ir. Aunque vamos, al final tanto trabajar no le sirvió de nada porque su madrastra le dijo que nanai de la china, que ella se quedaba en casa. Peeeeero nadie contaba con el pajarillo mágico de Cenicienta, que durante las tres noches que duró la fiesta le regaló tres vestidos diferentes con los que ir al castillo y conquistar al príncipe. La última noche, ambos ya estaban perdidamente enamorados y cuando Cenicienta le dice al príncipe que se tiene que ir ya a casa, él -muy caballeroso- se ofrece a acompañarla, pero ella se niega y huye dejando tras de si el famoso zapato.
Y ahora es cuando comienza la parte sangrienta, señoras y señores. El príncipe va a casa de Cenicienta y las hermanastras se prueban el zapatito, lo que pasa es que tienen unos pies tan enormes que no les vale. ¿Y qué hacen? Pues azuzadas por su madre una de ellas se corta los dedos y la otra el talón y así consiguen meter el pie en el zapato; pero el príncipe -que tonto no es, aunque lo parezca- ve la sangre y no se traga la treta. Que digo yo, ¿ha bailado durante tres días con la misma chica y tiene que ir probando zapatitos porque no es capaz de recordar su cara? Ahí veo yo amor del bueno. Pero bueno, la cosa es que él pide ver a su tercera hija, Cenicienta se prueba el zapato, le vale y se la lleva a su castillo para casarse con ella. Y para rematar la jugada, las hermanastras deciden asistir al enlace y, como venganza, dos furiosos pajarillos amigos de Cenicienta se ensañan con ellas, picoteándolas los ojos hasta dejarlas ciegas, por malas y falsas. Fin.
Moraleja: sé siempre una buena hermana o el karma se presentará ante ti en forma de pajarillo picoteador de ojos.
Y hasta aquí esta tercera entrada de Cuéntame otro cuento. ¿Qué os parece la versión antigua de La Cenicienta? ¿Os ha gustado? ¿La conocíais? ¿Cuál os gustaría que fuera la próxima de la cual os hablara? ¡Dejadme vuestras sugerencias y opiniones en los comentarios!
¡Holaa guapi! :3
ResponderEliminarMe ha encantado la entrada, es algo diferente a lo que se suele ver y he pasado un buen rato leyéndola jejeje yo ya conocía la verdadera historia desde hacía tiempo pero aún así sigue sorprendiéndome cómo cambian las versiones originales para hacer una peli Disney ^^
Besitoos <3
Nunca me gustó mucho la película de Disney, pero la versión original más macabra sí que me llama mucho la atención. Me gusta que sea un poco gore xDD.
ResponderEliminarUn saludo! :D
¡Este sí le conocía! Nos lo contó una profesora cuando estaba en 3ºESO, porque hizo su tesis sobre los cuentos clásicos y nos destripó Cenicienta, dejándonos sin infancia jajaja
ResponderEliminarMe encantan estas entradas :D
Saludos ^^
¡Fantástica entrada! Y sí, los cuentos originales, mil veces mejor :D
ResponderEliminarGracias por compartir.
Saludos ^_^
Muy interesante aunque no es de mis favoritas me ha gustado tu entrada.
ResponderEliminarUn beso.
La verdad es que Disney las adaptaba hasta convertirlas en historias bonitas, de las que cuando eres un niño te hacen pensar que todos tus sueños se van a hacer realidad y eso. Por el contrario, los Grimm iban a lo que iban, a contar una moraleja a los niños (o mejor dicho a las niñas) y cuanto más "bruta" fuese mejor, porque así se les quedaría grabado lo que querían enseñar xD
ResponderEliminarOtra historia que creo que sería interesante conocer cómo cambia desde sus inicios hasta su adaptación al cine por aquí el amigo Walt es Blancanieves (por si quieres hablar sobre ello en tu próximo "Cuéntame otro cuento") ;)
Un beso,
El Topillo Lector.
Como me gusta esta sección! Yo ya me conocía la verdadera historia de cenicienta (creo que me traumatizo un poco lo de cortarse los dedos xD) y la verdad que Disney se la llevo a su terreno (creo que prefiero la versión gore)
ResponderEliminarMe ha gustado la moraleja "o el karma se presentará ante ti en forma de pajarillo picoteador de ojos" xDDDDD
Besooos
No he leído la original pero estoy deseándolo por lo que sé es muy ¿macabra? jajaja
ResponderEliminarUn beso
Me encanta esta sección. Te lo digo siempre, pero es la verdad.
ResponderEliminarPues mira, la verdad es que Disney hizo pocos cambios al cuento original (quitando el tema de amputarse dedos y demás). Cierto es que no entiendo tampoco la poca memoria del príncipe! (aunque de pequeña nunca me lo planteé... qué inocentes éramos!)
Me encanta todo ese toque gore que le dan los hermanos Grimm!
A mí me gustaría saber la historia original de Blancanieves, que creo que esa sí quera era macabra!
Un beso!
¡Hola!
ResponderEliminarAdoro esta sección y me encanta la forma en que cuentas las historias.
Lo de la memoria del principe lo vi hace unas semanas por alguna parte pero es cierto, ¿tanto le cuesta reconocer a su amada? XD
La verdad es que la original me gusta más a la larga, la chica se esfuerza mucho más XD Y las hermanastras saben encontrar solución a sus enormes pies XD
Lo que pasa con este cuento es que hay tantas versiones, sobre todo cinematográficas, que ya no sabes cual creerte, gracias por contar la de los hermanos Grimm ^^
Estaría guay ver la historia de Caperucita roja pero Disney no hizo peli propiamente dicha así que propongo Rapunzel que con todo lo de la torre me da que será muy diferente ;)
Un beso! :)
Yo leí la versión manga del cuento original y era un tanto gore
ResponderEliminarBesotes!!
Hola!!! adoro esta sección, ya lo sabes!!! es que además, la cenicienta fue una de las películas que nunca vi de niña.... no se el motivo. pero nunca me llamó. conocí la historia a través de la novela
ResponderEliminarbesos
La versión antigua me parece mas sangrienta como ya has dicho, no me disgusta pero gustarme gustarme pues NO, la conocía de otro blog y tanto en ese como en este adoro esta sección <3. No me he podido leer todos los CUÉNTAME OTRO CUENTO, pero, si no lo has hecho me gustaría que la sección la protagonizase CAPERUCITA ROJA.
ResponderEliminarMuy buena la segunda moraleja.
ResponderEliminarEsta no es tan tan diferente de la versión de Disney! Una vez más, no conocía la historia original (tengo que leerme esos cuentos de los hermanos Grimm sí o sí!).
ResponderEliminarUn besito!
¡Me encanta esta sección!
ResponderEliminarCenicienta, de Disney, es una de mis películas favoritas desde siempre. Me acuerdo que de pequeña era una de las que más veía y al final, la cinta de vhs terminó super rallada, jejejejeje. Me sabía los diálogos y las canciones. Y hace poco me pude hacer con la versión en blu-ray y claro, ya me ves a mi cantando y danzando por casa. El problema es que estaba acostumbrada al español latino y ahora está en castellano, peeeero, no se le pueden pedir peras al olmo, como dice mi madre. Así que me conformo.
El cuento de los hermanos Grimm sí que me lo sabía, por una vez me sé uno!!!! Como Cenicienta me encantaba de pequeña, una vez busqué su historia y llegué hasta la de los Grimm, y me la leí enterita.
En fin, por bonita y eso me quedo con la de disney, aunque la parte sangrienta de los Grimm es muy buena, jajajaja. Me encantan tus comentarios metidos en medio de la explicación, como que el principe esté tres días con Cenicienta y luego tiene que ir probando el zapatito. Si es que.... jejejeje
Y otra cosa que me ha encantado... LAS MORALEJAS, sobre todo la segunda. Menos mal que no tengo hermanas :P
BESOTES
Me encantan estas entradas! Muy macabro lo de las hermanastras
ResponderEliminarSaludos