¡Buenos días de domingo! Hacía mucho que quería traeros una nueva actualización de esta sección pero nunca encontraba el hueco para ponerme a investigar por Internet y luego redactar la entrada, pero este fin de semana me puse manos a la obra y aquí le tenéis. Esta entrada va especialmente para mi querida Little Red que sé que llevaba mucho tiempo detrás de que le dedicara la entrada a su amada Caperucita.
En esta nueva entrega de Cuéntame otro cuento le toca el turno a uno de los cuentos infantiles más conocidos y más relatados a la hora de irse a dormir: Caperucita Roja. ¿Quién no ha oído hablar de la pequeña con caperuza roja que iba a visitar a su abuelita? Todos, ¿verdad? Pues hoy vamos a descubrir qué parecidos tenía la versión original con la que ha llegado a nuestros días. Antes de comenzar deciros que la entrada estará llena de spoilers de la "historia original" por lo que si tenéis intención de leerlas o algo tened cuidado que aquí os las destripo enteras.
¿Cuál es la versión más popularizada?
Antes de nada avisaros que la versión que yo conocía y que siempre he visto es esta, lo digo por si no coincide con la vuestra.
En ella Caperucita es una niña dulce y cariñosa a la que su madre encarga ir a llevar a su abuelita enferma una cesta con vino y dulces para que se recupere. Esto es algo de lo más normal, ¿qué madre no le encarga a su hija -de no más de 6 años- que cruce un río y un bosque lleno de peligros para ir a ver a su abuela en vez de ir ella misma? En fin, que luego ya vendrán los lloros cuando te rapten a la niña... Eso sí, antes de que la niña parta -y para acallar su intermitente conciencia- le advierte a la pequeña que no se salga del camino principal ni vaya por caminos desiertos. Tras prometer hacerlo, la niña se pone en camino y alegremente va recorriendo el sendero mientras tararea una dulce melodía y se hace amiga de ciento y un animalitos. Su tierno -y nada desafinado- canto llega a oídos de un lobo hambriento que se relame ante la proximidad de su nueva presa; pero antes de poder hacerse con ella aparece un leñador que se ofrece a acompañar a Caperucita un trozo de su trayecto. Cuando este se marcha el lobo se acerca a la niña y con unas tretas algo estúpidas -todo hay que decirlo- y a pesar de las advertencias que le hicieron a Caperucita sobre el lobo feroz que vivía en el bosque, la niña confía en él, hasta que Lobo descubre sus verdaderas intenciones y un cazador que pasaba por ahí rescata a la joven Caperucita antes de ser devorada y se ofrece a acompañarla a casa de su abuelita.
Mientras la niña está por ahí de aventuras con el cazador, el lobo llega a casa de la abuelita y haciéndose pasar por la niña consigue que esta le abra la puerta y acto seguido se la come. Así sin aliñar ni nada, que el tiempo apremia. Entre esto que Caperucita después de ir a Mordor y volver, darse un paseo por Narnia y hacer el primer año en Hogwarts llega por fin a casa de su abuela donde la espera el lobo disfrazado. Después de la charla de siempre sobre por qué tienes las orejas tan grandes y bla bla bla; el lobo se abalanza sobre Caperucita y esta intenta oponer resistencia pero claro, ¿qué puede hacer una indefensa niña contra un lobo? Nada y por eso mismo acaba en la tripa del lobo junto con su abuelita. Tras ello el lobo está tan cansado que decide echarse una siestecilla y sus ronquidos alertan al cazador amigo de Caperucita cuya curiosidad por saber el tamaño que tiene que tener la nariz de la abuelita para provocar tremendo escándalo le lleva a acercarse a la casa. Allí descubre al lobo profundamente dormido y oye la voz de Caperucita desde el interior de la barriga -efectos colaterales de comerte a la gente de un bocado y sin masticar, señor Lobo- y, sin pensárselo dos veces -y sin anestesia ni nada, porque ¿para qué? si abrirte en canal no duele casi- coge unas tijeras con las que abre al lobo y saca de allí a la niña y a su abuela. Para darle una lección al malvado lobezno deciden llenarle la tripa de piedras y volver a coserle, así cuando el lobo se despierta le pesa tanto la barriga que se tropieza y baja la colina rodando cual peonza. Tras ello Caperucita aprende la lección y promete nunca más desoír los consejos de su madre y su enferma abuelita se cura. Fin.
Moraleja: si tienes una madre tan desnaturalizada como la de Caperucita ten la precaución de llevar siempre contigo un bote de gas pimienta, por si las moscas -o los lobos-.
¿Cuál es la verdadera historia?
Yo creo que este cuento tradicional es uno de los más versionados que he visto. Mientras investigaba para esta entrada me encontré con algunas versiones un poco macabras como aquella en la que el lobo descuartiza a la abuela y se la ofrece como almuerzo a Caperucita cuando esta llega a casa, consiguiendo que la niña se coma a su propia abuela. Exacto, puaj. O también está la de los hermanos Grimm que ciertamente es muy parecida a la que os he relatado anteriormente, salvo que el lobo convence a Caperucita durante su viaje para que se aleje del camino y recoja flores para su abuelita, y así a él le de tiempo a llegar antes a casa de la anciana. Pero la versión que he decidido traer así un poco más explicada es la que hizo Perrault en 1697 y que introdujo en una recopilación de cuentos bajo el nombre de Le Petit Chaperon Rouge ('La Caperucita Roja').
La versión de Charles Perrault empieza de una forma parecida con la madre de Caperucita pidiendo a su hija que lleve una cesta con alimentos a su abuela enferma. La niña parte y por el camino se para a hablar con un hambriento lobo -como ella es tan inocente y tan pura pues no ve nada de malo en pararse a hablar con un perfecto desconocido que la miraba con ojillos de deseo-. En esa conversación que mantienen el lobo -muy astuto- consigue averiguar que Caperucita va a ver a su abuelita y el lugar preciso dónde vive esta última y, con toda la intención del mundo, decide hacer una apuesta con la pequeña para ver quién llega primero a casa de la anciana. El lobo engaña a la niña para que coja el camino más largo y mientras Caperucita va por el bosque haciéndose amiga de todas las criaturas vivientes habidas y por haber, el lobo llega a casa de la abuela y se la zampa de un bocado. Hagamos un inciso para poner por escrito la pregunta que todos os estaréis haciendo ¿cómo de grande era la boca del lobo como para comerse a una mujer adulta de una tajada? Todas mis conjeturas me han llevado a pensar que la mandíbula del lobo era como la de las serpientes: que se desencaja para engullir a su presa, porque sino no me lo explico... Pero bueno volvamos a la historia, la cosa es que el lobo se mete en la cama de la abuelita para hacerse pasar por ella cuando la chiquilla llegara. Caperucita después de todo un periplo por tierras desconocidas llega a la morada de su abuela y entra. Y aquí es donde viene la parte un poco... turbia, digamos. El lobo insta a la tierna Caperucita a que se quite la ropa y se meta en la cama con él. Sí, yo tampoco le encuentro el sentido a esto, pero bueno. La niña al introducirse en la cama empieza a ver que las proporciones en relación al tamaño de algunas partes del cuerpo de su "abuelita" no son las que ella recordaba y así se lo hace saber, hasta que llega a la parte de "Abuelita, qué dientes más grandes tienes", el lobo le contesta "¡Son para comerte mejor!" y acto seguido se abalanza sobre ella y se la come. Fin.
Moraleja: ten mucho cuidado de vigilar bien con quien te metes en la cama, que hay mucho lobo con piel de cordero.
Y hasta aquí esta cuarta entrada de Cuéntame otro cuento. ¿Qué os parece la versión antigua de Caperucita Roja? ¿Os ha gustado? ¿La conocíais? ¿Hay alguna otra versión del cuento que os gustaría compartir? ¿Cuál os gustaría que fuera el próximo clásico infantil que debatiéramos? ¡Dejadme vuestras sugerencias y opiniones en los comentarios!
La de Perrault se acerca a la mas versionada aunque le pongan el final feliz en el que el cazador rescata a caperucita. El caso es que me gusta la historia original :) Creo que tiene moraleja y es la de no fiarse de los desconocidos ni ser tan inocente. No había visto esta sección porque he andado liada pero me gusta mucho. un besin
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarYo hice un discurso para clase sobre los cuentos clásicos, que son más macabros de lo que parece y mi cuento principal fue este. Los cuentos son muy macabros, tenían muchas ganas de meter miedo a los niños de la época y sobre todo a las mujeres -no te metas en la cama (ejem, ejem) con cualquiera que puedes salir malparada = Caperucita se mete en la cama con el lobo y se la come)-.
Me ha gustado mucho la entrada, un beso! :)
Me ha encantado la entrada y la sección, desconocía la versión antigua y me ha parecido fascinante. ¡Besos!
ResponderEliminarhola!!!! si es que este cuento tiene muchas moralejas hija. Yo sigo pensando que la madre de Caperucita muy bien no estaba de la cabeza ¿cómo mandas a tu hija pequeña sola por el bosque con lobos hambrientos? Esa mujer no tenía dos dedos de frente. A mi me gusta la historia un poco más gore del cuento. pero vamos... caperucita es una crack. Se da como una vuelta por el mundo antes de llegar a casa de su abuela: Mordor, Hogwarts... vuelta entera jaajaja (me ha encantado esa parte :)
ResponderEliminarmil gracias por dedicarme esta entrada de hoy, sabes que me hace muchísimai ilusión
<333
¡Adoro esta sección! Una pena que sea tan mucho tiempo XD
ResponderEliminarNo la he leído por lo de los spoilers...
De casualidad ¿dónde puede leerse? Estuve buscando una vez estos cuentos originales pero al final siempre me quedo con las ganas >.<
Un beso ^^
Yo la versión de los hermanos Grimm la tengo en un volumen de recopilaciones de cuentos que había por casa, la de Perrault la encontré en Internet. Como son relatos cortos más que nada (ocupan 2 páginas como mucho), lo más seguro es que lo puedas encontrar en algunos libros donde haya recopilaciones de cuentos tradicionales o cosas así, pero vamos que sino buscando por la red lo tienes fijo :)
EliminarGracias por comentar.
Un beso ♥
La versión antigua está bien fea jajaj :)
ResponderEliminarbesote
Oh! Ya echaba de menos esta sección!!!
ResponderEliminarEn serio, qué leches pensaban algunos a escribir ese tipo de cosas? tenían o la mente muy sucia (que algunas partes de su cuerpo eran distintas? Really?) o muy sádicas (ahora vas y te comes a tu abuela).
En fin, me encanta ver las diferentes versiones. Es muy interesante! :)
Besos!
Ay, no había leído esta sección aún. Me encanta *-* yo también conocía la misma versión que tú como la más popular, la verdad. Aunque he flipado un poco con las versiones raras que se puede encontrar uno por ahí...
ResponderEliminarUn besito.