Book tag #1: El juego literario de las frases

¡Hola, holita! Como bien leéis en el título me voy a animar con esto de los Book tag que tan de moda están ahora, solo que yo lo haré en imágenes en vez de en vídeo porque no tengo cámara para grabar y a parte me da cosilla ponerme delante de una. El de hoy lo vi en el blog Generacion Reader y me pareció tan curioso que decidí hacerlo yo también, me gustó mucho la forma en la que lo presentaron así que eso también lo copié (espero que no les moleste).

 

El juego literario de las frases. Este curioso book tag consiste en elegir tus 10 libros favoritos y seleccionar en cada uno de ellos una palabra de la página y la línea que te indican. Después de eso tenemos que construir un texto sencillo y con sentido que contenga las diez palabras que nos han salido. Según las normas no se pueden escoger dos libros que pertenezcan a la misma saga, ni libros ilustrados o cómics y tampoco vale escoger ningún nombre propio.

1. El corredor del laberinto de James Dashner

2. Hijos del Clan Rojo de Elia Barceló

3. Siempre el mismo día de David Nicholls

4. Lola y el chico de al lado de Stephanie Perkins

5. Si decido quedarme de Gayle Forman

6. Caricias de hielo de Nalini Singh

7. Besar a un ángel de Susan Elizabeth Phillips

8. Si no despierto de Lauren Oliver

9. Susurros de A.G. Howard

10. Tú y yo: una historia catastrófica de Jess Rothenberg

Y el texto que me ha salido es...

   Había llegado el momento de empezar de cero en una nueva ciudad. Después de guardar el pasaporte que me acababan de sellar, hacerme un hueco entre la multitud de gente para recoger la maleta y de hacer mi correspondiente rito de la buena suerte, salí del aeropuerto. Lo primero que me llamó la atención fue el olor, nunca me había parado a pensar que los lugares pudieran oler aunque, si lo pienso bien, por algo dicen que en las montañas el aire es más puro. Siempre me ha gustado mucho la naturaleza por eso no dude ni un momento en mudarme a este pequeño pueblo del norte de España, solo había una cosa a la cual nunca llegaría a acostumbrarme: la nieve. La odiaba. Y lo peor era cuando además hacía viento, esa sensación de tener la cara mojada, de casi no poder ni abrir los ojos y que para colmo de males llegaras a casa con la ropa totalmente empapada. Pero qué remedio, tendría que acostumbrarme.

 

Hay que reconocer que no se me da muy bien escribir pero al menos lo he intentado, ¿qué os ha parecido? ¿Os ha resultado igual de curioso que a mi? ¿Os animáis a hacerlo? ¡Contarme, contarmeeee!